En Betsaida, el mes de mayo se tiñe con los colores de la inclusión y la celebración. La alegría inundó nuestro complejo con la Fiesta de las Cruces de Mayo, donde la ilusión y la diversión brillaron en los rostros de todos. Nuestro Complejo Residencial para personas con discapacidad se vistió de gala presentando su sublime «Cruz de Mayo», un símbolo de unidad y buenos momentos.
Con una procesión única, liderada por nuestros residentes con discapacidad y diversidad funcional, no faltó detalle. La jornada estuvo repleta de color, desde el sudario de la Cruz, hasta el último perejil. La música y las sevillanas hicieron bailar a todos, mientras costaleros, capataces, flores y vivas a la Cruz fortalecían el ambiente de fiesta. Entre refrescos, picoteo y los adornos de las peinetas de las romeras, la felicidad era palpable.
Estas celebraciones son el corazón de nuestro compromiso con la alegría y como toda gran familia, nos unimos para compartir estos momentos de luz. Cada viernes, nuestra Cruz saldrá para seguir alegrando nuestro hogar, demostrando que las tradiciones tienen también un poder terapéutico.
Finalmente, queremos extender un especial agradecimiento a Paco Barbosa, quien con su dedicación y habilidad, nos regaló esta magnífica Cruz que promete ser compañera de innumerables recuerdos y sonrisas para nuestros usuarios. ¡Gracias, Paco, por tan preciado regalo al corazón de nuestra familia!
La Fiesta de las Cruces de Mayo en Betsaida no es solo una celebración, sino una afirmación de que juntos, sin importar las diferencias, podemos crear momentos de magia y significado para todos.
